En un mundo lleno de experiencias diversas y emociones cambiantes, a menudo nos encontramos atrapados en un ciclo donde los aspectos negativos parecen destacar más que los positivos.
A lo largo de un día, los seres humanos recibimos millones de inputs diferentes. Desde las noticias en la televisión o, desde un punto de vista más individual, cualquier hecho que pueda sucedernos en nuestro puesto de trabajo, en los estudios y, recientemente, en las redes sociales por la exposición pública que muchas personas hacen de su vida.
En la Clínica de Salud Mental Sr. Muñoz, hemos visto cómo algunos de estos casos han llegado a provocar incluso trastornos de ansiedad y fobia social.
Pero, ¿por qué sucede esto? ¿Por qué nuestra mente tiende a retener lo negativo?
Lo vemos.
La evolución de la mente humana a lo largo de la historia.
Por la propia evolución del ser humano, nuestro cerebro está preparado para estar alerta ante posibles amenazas y situaciones negativas.
Este mecanismo tiene su origen hace millones de años en vista a la propia supervivencia: nuestros antepasados necesitaban ser extremadamente conscientes de los peligros para protegerse a sí mismos y a sus comunidades.
Esta tendencia a retener lo negativo se ha conservado a lo largo del tiempo, lo que significa que todavía tendemos a prestar más atención a lo que percibimos como una amenaza.
¿Por qué la negatividad tiene un efecto mayor en nuestra mente?
La negatividad tiende a tener un impacto más fuerte en nuestras mentes que la positividad. Los eventos negativos suelen dejar una impresión más duradera en comparación con los eventos positivos.
Este fenómeno se conoce como el «efecto negativo» y puede influir en cómo recordamos las experiencias, procesamos la información y tomamos decisiones en el futuro.
Sin ir más lejos, y poniendo un ejemplo muy cotidiano, es muy probable que todos tengamos una imagen muy negativa de nuestra visita al dentista. Seguro que sabéis de lo que hablamos.
A pesar de que haya aliviado nuestras molestias o dolor, generamos una imagen negativa que nos influye al pensar en tener que volver a una consulta de odontología y genera en muchas personas una fobia o rechazo absoluto que puede requerir de ayuda profesional para superarlo.
La influencia de los inputs externos y las redes sociales
Actualmente, y en la mayoría de las ocasiones sin darnos cuenta, recibimos miles de inputs al día que pueden afectar a nuestra percepción.
Sin ir más lejos, los propios medios de comunicación exponen mucho más los sucesos negativos, lo que puede contribuir a nuestra percepción sesgada del mundo.
Esta exposición constante a la negatividad puede afectar nuestra propia visión y amplificar nuestra tendencia a enfocarnos en lo negativo.
Si hablamos de las redes sociales y su creciente uso adictivo, no podemos obviar que muchas personas exponen constantemente su vida de manera pública, incluyendo sus propios cuerpos, su vestuario, sus hogares incluso sus familias.
Este “modo de vida” también genera crítica e impactos negativos en un nivel que puede ser muy destructivo para las personas, además de generar una preocupante adicción que puede acabar en la necesidad de un tratamiento y terapia.
¿Qué son los trastornos de ansiedad y la fobia social?
Los trastornos de ansiedad son condiciones mentales que involucran una respuesta exagerada y persistente al miedo o preocupación, y pueden interferir significativamente con la vida cotidiana.
Estos trastornos incluyen la ansiedad generalizada, las fobias específicas, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) y el trastorno de pánico, entre otros.
Las personas con trastornos de ansiedad pueden experimentar síntomas como nerviosismo constante, miedo irracional, tensión muscular, insomnio y dificultad para concentrarse.
Estos trastornos pueden ser desencadenados por diversas situaciones o estímulos, como los que acabamos de ver, y su impacto puede variar desde molestias leves hasta afectar gravemente la calidad de vida.
Por otro lado, la fobia social es un tipo específico de trastorno de ansiedad en el cual una persona experimenta un miedo abrumador a situaciones sociales o de desempeño, temiendo el juicio o la crítica negativa de los demás.
Esto puede llevar a evitar actividades sociales, afectando a las relaciones personales y profesionales. El apoyo emocional y la comprensión del entorno social son componentes esenciales para ayudar a quienes sufren de trastornos de ansiedad y fobia social a superar sus temores y recuperar el control sobre sus vidas.
Clínica Dr. Muñoz, os ayudamos a cuidar de vuestra salud mental en Murcia
En la Clínica Dr. Muñoz llevamos más de 80 años atendiendo en Murcia a personas con problemas relacionados con su salud mental.
Tenemos un equipo compuesto por profesionales cualificados preparados para atender el tratamiento de trastornos de conducta o depresión, por ejemplo, así como problemas actuales como las recientes adicciones a la tecnología y las redes sociales en los adolescentes.
No dudéis en contactar con nosotros si creéis que podemos ayudaros y visitar nuestra web para conocer más sobre nuestros tratamientos y servicios.